Diversos hoteles a lo largo del país han decidido ofrecer sus instalaciones como una forma de ayudar en medio de la crisis sanitaria por el covid-19. Actualmente hay 130 residencias sanitarias operando, de las cuales 120 corresponden a alojamientos turísticos, con una capacidad para 11.812 personas. Entre los establecimientos que han optado por esta opción destacan el Hotel Best Western de Estación Central; Hotel Plaza San Francisco y el Hotel Bonaparte en Santiago; los hoteles O´Higgins y Queen Royal en Viña del Mar; mientras que en San Antonio están funcionando los hoteles Puerto Mayor y Enjoy.

Fuentes ligadas a estos establecimientos explican que además de poder aportar en la emergencia, esta alternativa les ha permitido cubrir los costos fijos mensuales, luego de varias semanas de estar cerrados y sin ingresos, pero aclaran que 'no se trata de un negocio'. 'Es una fuente de ingresos que es un poco mejor que estar cerrados, pero ayuda', sostuvo un ejecutivo, quien agrega que en un principio existió cierta reticencia de las firmas hoteleras por ser asociadas a los contagiados con el virus, sin embargo, la urgencia de contar con más cupos para pacientes y la crisis en el turismo terminaron por hacerlos cambiar de opinión.

'Hoy los contagiados están en todas partes. Además, hacer un proceso de sanitización de las piezas una vez que sale la persona recuperada no es algo complejo', declara. Explicaron que es el Ministerio de Salud el que paga por cada habitación ocupada con un servicio de cuatro comidas diarias y el aseo correspondiente, por un valor que ronda los $50.000 por pieza. Al mismo tiempo, se asigna un equipo médico para ayudar en la administración del hotel y para monitorear el estado de salud de los huéspedes. En cuanto al número de personas que han recibido, desde algunos hoteles afirmaron que han llegado a tener una ocupación cercana al 40%. El presidente de Hoteleros de Chile, Andrés Fuenzalida, dice que aunque la hotelería ha estado muy golpeada ha podido reaccionar ante la crisis.

'Llevamos casi tres meses sin oxígeno, a pesar de eso hemos acogido el llamado del sector público para salir pronto de esta situación sanitaria', sostiene. Desde el Ministerio de Salud explicaron que estas residencias están disponibles para aquellos contagiados con coronavirus —pero que por su estado de salud no requieren que sean hospitalizados— y que por diversas condiciones, como hacinamiento o tener contacto con personas en riesgo, no pueden cumplir la cuarentena de aislamiento en sus casas. La evaluación de cada caso está a cargo de los seremi de Salud regionales.