Pais:   Chile
Región:   Metropolitana de Santiago
Fecha:   2020-04-25
Tipo:   Prensa Escrita
Página(s):   B4
Sección:   Economía y Negocios
Centimetraje:   27x13

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A septiembre de 2019 Enjoy acumulaba una deuda financiera neta por US$ 400 millones.
El Mercurio
Compañía está en tres países con 10 casinos y 11 hoteles
Pérdidas y grandes deudas: el mal historial financiero que arrastraba la operadora
Crisis en la industria de casinos por el coronavirus fue el golpe final de la firma, que acumulaba varios años con un negativo desempeño.
No hay duda de que el estallido social y la crisis por el covid-19 fueron importantes golpes económicos que llevaron a Enjoy a acogerse al proceso de reorganización judicial. Sin embargo, la firma de entretenimiento arrastraba una débil situación financiera desde hace unos años. Durante los últimos cuatro ejercicios la compañía exhibe pérdidas y un elevado nivel de deuda.

La empresa fue fundada en 1975 por el fallecido empresario Antonio Martínez, luego de haber postulado a la concesión del casino de Viña del Mar.

Algunos hitos importantes de la empresa en los últimos años fueron su apertura en la Bolsa de Santiago en 2009, convirtiéndose así en la única firma latinoamericana de casinos listada en bolsa, y la entrada al mercado uruguayo en 2013 con el ingreso como socio operador del Hotel Casino Conrad —el más grande de la región— con el 45% de la propiedad. Actualmente, opera en Chile, Uruguay y Argentina, y cuenta con 10 casinos y 11 hoteles.

Desde hace unos años, Enjoy había recurrido a varias estrategias para mejorar su complejo panorama. Con el objetivo de darle un impulso a la empresa, en 2018 se selló el ingreso del fondo de inversiones Advent vía un aumento de capital por US$ 184 millones para tomar un 35% de la firma. De esta forma, el fondo se convirtió en el principal accionista de la empresa, desplazando a la familia Martínez.

Sin embargo, la compañía siguió acumulando cifras negativas. A septiembre de 2019, contaba con una deuda financiera neta de US$ 400 millones, de los cuales parte importante correspondía a un bono emitido en 2017 en Estados Unidos por cerca de US$ 200 millones. De hecho, la compañía se encontraba en un plan financiero para refinanciar ese bono, donde una de las medidas era vender los activos inmobiliarios de los casinos de Antofagasta, Coquimbo y Pucón para luego arrendarlos. A través de esto, pretendía recaudar US$ 150 millones.

Por otro lado, la gigantesca operación en Uruguay no estaba dando buenos resultados. A pesar de que en 2019 representó el 28,2% de los ingresos de la empresa, solo significó un 14,7% del Ebitda, por detrás de los casinos de Coquimbo, Santiago y Viña del Mar.

A finales de 2019, la firma renegoció con los tenedores de sus bonos locales los covenants (compromisos), lo que le permitió modificar la relación entre la deuda financiera neta y Ebitda, desde 5,5 veces a 6,5 veces, dándole más holgura para endeudarse.

Pero no se consiguieron buenos resultados: durante el ejercicio de 2019 la razón de liquidez de la compañía fue de 0,86 veces, siendo inferior a la registrada en 2018 de 1,1 veces, mientras que la razón de endeudamiento aumentó a un total de 3,46 veces.

Recuadro
Durante el ejercicio de 2019 la razón de liquidez de la compañía fue de 0,86 veces, siendo inferior a la registrada en 2018 de 1,1 veces.
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Carolina Undurraga B. --